domingo, 26 de octubre de 2008

PETROGLIFO DE O VILAR


El conjunto de grabados de O Vilar (Bertamiráns, Ames), fue localizado durante la campaña de seguimiento de las obras de la autovía Santiago-Noia llevadas a cabo en 2006. Los resultados de esa campaña para este caso concreto han sido publicados por Santos Estévez y Seoane Veiga y pueden consultarse en este enlace, en la página 163 del documento en .pdf.

El conjunto, salvado in extremis de desaparecer bajo la autovía, presenta varios elementos interesantes. A pesar de tratarse de una estación formada casi en exclusivo por cazoletas y otras concavidades llama la atención su relativa extensión, ya que los grabados aparecen en al menos cuatro rocas diferentes (probablemente cinco originalmente y no dos, como se señala en la publicación mencionada), alguna de las cuales fue mutilada durante las obras. Resulta interesante su ubicación en la zona baja del corazón del valla de Amaía, en uno de los pocos outeiros rocosos en una zona de sustrato básicamente sedimentario.

Del mismo modo, la agresión de la que fue objeto con la construcción de la autovía, que a pesar de ser un mal menor y de haber preservado el grueso de la estación no deja de ser una agresión, ha supuesto una oportunidad magnífica para plantearse una acción de valorización de la estación por parte del ayuntamiento, de manera que se haga de la necesidad virtud y la lamentable ubicación en la que han quedado los grabados sirva para incrementar los atractivos patrimoniales de un ayuntamiento (Ames) y de una localidad (Bertamiráns) que no andan sobrados en ese aspecto.

lunes, 20 de octubre de 2008

PETROGLIFO DE A PEDRA ESTIVADA


Los grabados de A Pedra Estivada (Ames) se encuentran sobre un pequeño outeiro rocoso en las inmediaciones del cementerio municipal de este ayuntamiento coruñes. Su estado de conservación es lamentable, hasta el punto de que en condiciones normales de iluminación únicamente se aprecia la existencia de una serie de cazoletas situadas en la periferia de las grandes piletas naturales de la parte superior así como lo que parecen ser restos de dos pequeñas combinaciones circulares.

Localizados al inicio de las obras de la autovía Santiago-Noia, su existencia fue puesta en conocimiento de la Dirección Xeral de Patrimonio en aquel momento.


Se trata de un conjunto modesto y en deplorables condiciones de conservación. Pese a ello, resulta de interés por su ubicación.

domingo, 12 de octubre de 2008

PETROGLIFO DE OS PETÓNS DO CASTRO I


La estación de Os Petóns do Castro (Cures, Boiro, A Coruña) es, probablemente, una de las más interesantes de la provincia. Se trata de una pequeña meseta a media ladera de la Serra do Barbanza que se encharca durante los meses de invierno y que aparece circundada por cerca de diez rocas con grabados.

La más espectacular de ellas, publicada por Xerardo Agrafoxo en 1985, es la que en su momento se conoció como Petroglifo de Loxo, aunque en la actualidad y al haberse descubierto los otros conjuntos suele denominarse Os Petóns do Castro I. Se trata de una gran superficie granítica, a ras de suelo, en la que aparecen al menos 14 combinaciones circulares de factura diversa. Se identifica alguna de círculos concéntricos con surco radial exterior mientras que, en su extremo oriental, aparecen cuatro círculos con cazoletas en su interior conectados entre si por surcos radiales.

Cuatro metros al norte, en otra pequeña roca, se identifican claramente un círculo con cazoletas en su interior y restos de una segunda combinación circular muy erosionada. En otras rocas situadas a escasa distancia aparecen cazoletas aisladas.

Se trata de un conjunto razonablemente bien conservado, si bien su localización y acceso en la actualidad no resultan sencillos debido al deterioro de las pistas forestales y al abandono de la zona, en la que ha crecido abundante vegetación.

Os Petóns do Castro I presenta, pese a ello, evidencias de haber sido limpiado de manera tosca en alguno de sus sectores en época reciente (como puede observarse en la segunda imagen). Este hecho, junto a la presencia de piedras marcando el lugar de cada uno de los motivos y de un poste colocado para indicar su ubicación exacta, parecen indicar que se trate de un conjunto visitado con cierta frecuencia y, según parece, sujeto a actividades ilícitas que aceleran gravemente su deterioro.

viernes, 10 de octubre de 2008

PETROGLIFO DE AS LAXIELES


El petroglifo de As Laxieles fue localizado hace unos tres años dentro del proceso de localización de nuevas estaciones que se viene dando en el territorio de Porto do Son en los últimos años y ha sido estudiado en detalle dentro de los trabajos, todavía inéditos en su mayoría, que ha desarrollado el Grupo de Estudio de la Prehistoria del Noroeste de la Universidad de Santiago bajo la dirección del profesor Ramón Fábregas.

He tenido la posibilidad de colaborar con este grupo en algunas cuestiones, relacionadas fundamentalmente con el análisis estilístico e iconográfico de algunos conjuntos, y he podido visitar con ellos esta estación que, de otra manera y sin los medios que a ellos les fueron autorizados, pasaría prácticamente desapercibida dado su gravísimo estado de deterioro.

El conjunto se encuentra cerca del núcleo urbano de Porto do Son, en la subida hacia el Monte Dordo, en el que se encuentran otros petroglifos ya clásicos como el de Pozos da Garda.


En As Laxieles se identifican (con ayuda de iluminación artificial ya que, como digo, su estado actual los sitúa al borde de la desaparición) dos laberintoides que resultan excepcionales en la mitad septentrional de Galicia y que son la primera representación de este motivo en la comarca de O Barbanza.

Por las imágenes, de pésima calidad, se puede apreciar su lamentable estado de conservación actual y las dificultades para su estudio, que hicieron que en un primer momento se catalogasen como combinaciones circulares.

domingo, 5 de octubre de 2008

PETROGLIFO DE FONTE SOBREIRA


La estación de Fonte Sobreira (Boiro) es un espectacular conjunto de combinaciones circulares y cazoletas con una ubicación excepcional. Situada en un outeiro rocoso a más de 500 m. de altitud, en los límites de la llanura superior de la Serra do Barbanza, se convierte en una de las estaciones a mayor altitud de la comarca y de la provincia. Su localización en el límite de la pendiente oriental de la sierra, en una zona con vistas espectaculares del valle del río Coroño y de la Ría de Arousa, con el yacimiento de Couto da Amoreira en primer término, la convierte en un lugar excepcional por sus características paisajísticas y por la relación entre los grabados y el entorno.

Los motivos identificados, al menos 13 combinaciones circulares muy erosionadas (no es difícil imaginar la acción de los agentes atmosféricos en un lugar tan expuesto), aparecen grabados en las diferentes superficies rocosas, por lo que para tener una visión global del conjunto es preciso situarse en la parte alta del outeiro, de tal manera que los grabados rodean al espectador. De alguna manera, la participación del espectador, casí se podría decir que su integración como un elemento más de la composición, es necesaria para la percepción total del conjunto.

Se trata de una estación que permanece inédita, si bien fue presentada en el I Encontro Arqueolóxico do Barbanza y es conocida por las autoridades municipales responsables. A falta de estudios pormenorizados, los petroglifos de Fonte Sobreira pueden entenderse como una de las estaciones más interesantes del territorio boirense y del conjunto de la sierra.

jueves, 2 de octubre de 2008

ESTRELLA DE CINCO PUNTAS EN PONTEMACEIRA


Ya que el otro día traía al blog una estrella de seis puntas, hoy vamos con una de cinco. A pesar de que no se trata de un petroglifo ni de un grabado, ya que está en relieve en la superficie del sillar, resulta interesante por lo poco habitual del motivo, por su buen estado de conservación y por haber sido, probablemente, reaprovechada.

La estrella aparece sobre la superficie de un sillar que en la actualidad forma parte del suelo del interior de un molino fluvial rehabilitado hace unos años. La anómala ubicación del motivo, en una zona de paso, hace pensar en un reaprovechamiento por lo que, aunque hablemos de una época plenamente histórica, al menos tendríamos un terminus ante quem para situarla.

El grabado se encuentra en el interior de uno de los dos molinos rehabilitados que hay junto al puente medieval, del lado en el que la aldea de Pontemaceira pertenece al ayuntamiento de Negreira (A Coruña).

En cuanto a significados la estrella de cinco puntas, denominada pentagrama geométrico, pentáculo (sobre todo en ciencias ocultas y esoterismo), pentalfa o pentángulo ha pervivido a lo largo del tiempo, al menos desde el primer ejemplo conocido, localizado en la ciudad mesopotámica de Ur, convirtiéndose en símbolo cristiano en la edad media (representa las cinco heridas de Cristo), utilizado en rituales paganos y ocultismo, como elemento relacionado con la proporción áurea, como símbolo adoptado por la masonería, representando a determinadas iglesias neopaganas actuales, como la Wicca o, en general, en relación con cultos satánicos, ya sea en sectas o hasta en grupos musicales (Slayer, por ejemplo), si bien en estos casos el pentáculo aparece invertido.

Sin que podamos descartar otras interpretaciones, dado la descontextualización creo que hay que inclinarse por un significado de carácter cristiano lo que nos llevaría a algún momento de la edad media o posterior.

Fotografía de Xoán Guitián